El alcalde de Perpiñán, Louis Aliot, ha mostrado hoy su apoyo al sector de los panaderos artesanos de la ciudad, un ámbito que se ve muy afectado por la inflación. A través de un comunicado, el Ayuntamiento de Perpiñán ha indicado que “las facturas de energía se multiplican de tres a ocho, poniendo en peligro la supervivencia de estas empresas”. “Las medidas de ayuda adoptadas por el Gobierno no se adaptan a las características de este sector de actividad y muchas empresas no pueden beneficiarse de ellas o en proporciones que no les permiten amortiguar la inflación”, añade el equipo de gobierno.
Aliot recuerda que el sector de la panadería y la pastelería se encuentra “en crisis desde hace varios años, con una disminución constante del número de establecimientos durante 30 años”. Esto se explica por el cambio en los patrones de consumo -menos consumo que hace unos años y competencia en forma de hamburguesas, kebabs o tacos, por ejemplo-, pero también por la guerra de precios en los supermercados.
En la nota, el Ayuntamiento subraya que la guerra en Ucrania “aceleró y agravó” el contexto. “El aumento de los costos de energía no tiene impacto sólo en la factura de la luz de los panaderos, sino también la de materias primas, transporte y embalaje. De hecho, la energía es la base de la competitividad de cualquier empresa industrial, y un aumento de la misma afecta a toda la cadena productiva”.
Algunas cifras
El gobierno municipal liderado por Aliot también pone algunos datos relevantes encima de la mesa. “El número de empresas de panadería y pastelería es de aproximadamente 230 en el departamento de Pirineos Orientales, para aproximadamente 1.300 puestos de trabajo. Este sector se caracteriza por una proporción muy elevada de aprendices. En Perpiñán hemos identificado una treintena de establecimientos, que representa 1 establecimiento por cada 3.400 habitantes, es decir, un 25% menos que las ciudades del mismo estrato que Metz o Besançon”. Según las organizaciones profesionales, se estima que el 30% de las panaderías y pastelerías es probable que cierren en 2023.
“El coste de la energía: el problema básico”
“Restaurar el orden en el precio de la electricidad requiere la salida inmediata de las normas de precios europeas para electricidad”, indica Aliot, que añade: “Una vez más, el Gobierno está practicando la política del cheque ¡Urgencia sin ninguna anticipación! Da con una mano lo que toma el control de la otra a través de impuestos o deudas, sin liquidar el problema básico: el coste de la energía. Sin embargo, se necesitan soluciones duraderas. El precio de la electricidad se ha vuelto fuera de control”.
Autor: Redacción
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